THE REGGAE FAMILY : octubre 2009

Con ánimos de realizar esta ruta desde hacía algún tiempo, recojo a Denis en BCN sobre las 10.15h. para desplazarnos en coche hasta la localidad de Folgueroles.

Esta ruta recorre zonas boscosas desde la plana de Vic hasta el pantano de Sau, desde donde tendremos unas vistas espectaculares del Collsacabra, con sus cortados impactantes y el siempre enigmático pantano de Sau, con el antiguo pueblo sumergido del que se ve el campanario de la iglesia sobresalir de sus aguas. Cabe comentar que este pantano junto con Susqueda son los más importantes a lo largo del rio Ter.

A las 12h. ya estamos sobre nuestras monturas y tras buscar donde se inicia la ruta, ya que el centro btt brilla por su ausencia, la localizamos detrás del campo de fútbol de Folgueroles. A partir de aquí se trata de seguir las marcas amarillas de esta ruta circular de unos 35km.

La ruta atraviesa unas fagedas y bosques de encinas impresionantes, sobretodo en otoño, a través de unas pistas forestales que durante los primeros Km apuntan siempre hacia arriba. En un cruce de caminos nos encontramos dos alternativas a la ruta, decidimos ir hacia la derecha, nos aguarda una ascensión durilla por un camino de carros, empedrado y degradado, que la convierte en ocasiones en algo técnica. Al llegar a la cima aparecemos en uno de los tallats, que caracterizan la zona con unas vistas espectaculares sobre Vilanova de Sau, el pantano, els cingles de Tavertet, Rupit y hasta donde la vista alcanza podemos ver el cingle sobre el que se levanta el Santuari del Far.

En este punto se inicia un descenso a toda velocidad sin olvidar que de vez en cuando hay que estar pendiente de las marcas, ya que si te pasas pierdes la ruta y en ocasiones reencontarla tiene su dificultad.

El descenso finaliza en la carretera de acceso al parador nacional de Sau desde donde las vistas que nos siguen acompañando son de cine.

A partir de aquí hay que armarse de paciencia, debido a que la ruta se adentra en una trialera que con el barro que hay es practicamente inciclable y tras cruzar una riera hay que ascender por un camino que andando cuesta lo suyo. Este tramo nos hace perder mucho tiempo, ya que casi todo es a pie.

Este sendero finaliza en la población de Fussimanyà. En este punto paramos a comer algo y tomar un refresco en el restaurante del lugar, que tiene muy buena pinta.

Las marcas nos conducen a la salida del pueblo por un sendero sinuoso divertido que nos lleva de nuevo a ver el Ter en su internamiento en el pantano donde forma un meandro precioso.

Continuamos en dirección Tavèrnoles y tras ascender de nuevo a pata por otra trialera aparecemos en un gran prado con unas inmensa rocas y una iglesia en lo alto de un turó,se trata de la zona de Savassona, que alberga restos de un poblado ibérico del 3000 a.C. y una iglesia románica (Sant Feliu de Savassona) del año 1035. Un paraje espectacular frecuentado por escaladores.