Cuenta la legenda que Sant Jordi mató al dragón en esta localidad, de ahí estas fiestas medievalescas en un entorno inigualable para las mismas
Fira medieval
Montblanc estaba a rebosar de gente, todas sus calles y plazas estaban llenas de puestos ambulantes de todo tipo de productos de la zona, pastelería, embutidos, y vinos de la comarca, entre los que no podían faltar los del Celler Vega Aixalà, con quienes visitamos este verano sus viñas y quedamos maravillados.
En esta ocasión, por evitarnos desplazamientos, elgimos el camping Montblanc Park, del que hay que decir que tiene buenas instalaciones, con gran potencial, pero que en esta época encontramos algo descuidado y enfocado al público francés.
parque infantil
En definitiva un buen fin de semana en buena compañía que nos ha permitido recargar pilas para nuestro día a día.
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