Delta del Ebro y Beceite

Por fin desde Navidades que no coincidiamos la Reggaefamily unos días al completo. Esta vez después de barajar varios destinos nos decantamos por visitar les terres de l'Ebre y desde allí escaparnos a Beceite y alrededores.
El camping elegido fue el ametlla village y utilizar de esta manera nuestra targeta acsi para economizar algo.
El camping está dividido en varias zonas, algunas con poca sombra y con la zona de servicios, piscina, etc fuera del recinto en una zona anexa. Este detalle es incómodo a la hora de la verdad. Junto al camping hay un par de calas increíbles de piedras de una gran belleza.
El segundo día nos desplazamos a la zona del Delta, concretamente a Poblenou del Delta donde disfrutamos de un paseo en coche de pedales por diferentes observatorios de aves. El Delta es un paraíso para los aficionados a la ornitología y hay numerosos puestos de observación colocados en lugares estratégicos. Después de una paellita en la Paquita nos fuimos a la playa del Trabucador, una de las puntas del Delta donde poder disfrutar del paisaje y de sus infinitas playas.
De vuelta al camping, un paseo recomendable por sus calas al atardecer es un acontecimiento espectacular.
Otra jornada la dedicamos a ir Ebro arriba hasta la localidad de Miravet, lugar emblemático con su majestuoso castillo templario custodiando el río y lugar de batallas épicas incluso en tiempos recientes en la guerra civil española.
El castillo merece una visita y poder acceder a sus murallas nos hace entender aún más si cabe su lugar estratégico ,desde el que se domina gran parte del curso del río por estas tierras.
Es una visita obligada y muuuy recomendable.
Por último y a pesar de que la zona dels Ports merece una visita sólo para ella, decidimos tener una toma de contacto y acercarnos a Beceite a ver el famoso Parrizal. Después de una hora de viaje aproximadamente llegamos a este pueblecito de Teruel en pleno corazón dels ports, tras dejar atrás pueblos encantadores como Horta de sant Joan, Bot...
En Beceite por una estrecha pista forestal llegamos a el Parrizal y tras los consejos y normas del agente forestal nos dirigimos a pie a completar el recorrido a lo largo del río Matarraña. Es un paseo que transcurre por senderos y pasarelas de madera sobre las aguas cristalinas del río donde en todo momento estamos vigilados por bandadas de buitres leonados y rebaños de cabra Montesa, abundante en la zona. Cabe mencionar que en esta parte del recorrido no se puede bañar en el río ni soltar al perro, ya que es una de las últimas reservas de cangrejo de río autóctono y nutrias.
En una parte del recorrido nos desviamos para ver unas pinturas rupestres donde se representa unos guerreros.
Ya de regreso hicimos parada en Valderoures para comer algo y callejear algo, pero una tormenta nos truncó nuestros planes y tuvimos que adelantar el regreso al camping.
En definitiva unos días de turismo y relax resumidos en estas líneas.